viernes, 31 de diciembre de 2010

La estrella del año


Referente del deporte femenino, la rosarina Luciana Aymar fue la figura del año deportivo por sus logros, campeona mundial en su Rosario y mejor del planeta.


Por Fernando Pecorelle




"Cuando era chica, iba por la calle con el palo de hockey y la gente me paraba para preguntarme a qué deporte jugaba", recuerda Luciana Aymar.

"Lucha" no sabía en ese entonces que ese instrumento la iba a convertir por siete años consecutivos en la mejor jugadora del mundo. En ese entonces, nadie sabía tampoco que por ella, muchas chicas querrían ser.

Ser como Luciana Aymar, es quizá su mayor logro. Incluso tal vez más que sus dos consagraciones en mundiales, sus cuatro campeonatos de Champions Trophy, su flamante Olimpia de Oro y sus incontables medallas de podio en las diferentes competiciones que el mundo del hockey puede ofrecer. Porque que diferentes generaciones de personas quieran ser como, es el desafío más grande que una personalidad, en este caso un deportista, puedan enfrentar. Luciana ya lo logró.

La estrella comenzó a brillar en Rosario, allá por 1977. Tenía 7 años cuando se inició en el Club Atlético Fisherton de esa ciudad santafecina, luego pasó al Jockey Club y de allí, su primer contacto con la Selección. Ganó todo, y más. Lo hizo todo, y más también. Sólo una cosa le ha quedado pendiente pero no inconclusa, porque en 2012 seguramente estará en Londres para buscar una medalla olímpica de oro. Hacer un repaso de su historia deportiva resultaría muy pragmático, versado. Luciana Aymar ha trascendido incluso la grandeza de su paso por el deporte, de los premios, de los reconocimientos; se ha transformado en una de las atletas más importantes del deporte argentino en toda su historia. Y ha marcado una tendencia. Verla jugar asombra. Verla correr estremece, verla gritar con la camiseta argentina invade todo el cuerpo. Ella es "Lucha", "La Maga", "El Diego del Hockey", "Luchita". Ella ya es leyenda.Justificar a ambos lados