viernes, 28 de mayo de 2010

Despedida argentina en París


Leo Mayer sucumbió por 6-4, 3-6, 7-5, 6-7 y 6-4 ante el croata Cilic y se despidió en la tercera ronda. Por su parte, Zeballos cayó con parciales de 6-2, 6-2 y 6-3 frente al español Nadal.


Por Fernando Pecorelle


Roland Garros se quedó sin argentinos. Leonardo Mayer, el último representante de la Legión en Parías, se despidió esta tarde en la tercera ronda tras caer ante el croata Marin Cilic con parciales de 6-4, 3-6, 7-5, 6-7 y 6-4, en un encuentro que duró cuatro horas y 14 minutos.

El correntino, 57° en el escalafón, le jugó de igual a igual al duodécimo del ranking y estuvo muy cerca de dar el golpe en el segundo Grand Slam de la temporada. Levantó dos match points en el último game y tuvo la chance de quebrar, pero una derecha larga terminó con su sueño.

En tanto, a Horacio Zeballos no le pesó jugar por primera vez en su carrera ante el impresionante marco que entrega el estadio Philippe Chatrier. Se lo notó realmente tranquilo y nada de eso tuvo que ver con su eliminación en segunda fase. El problema fue otro: enfrente estuvo Rafael Nadal.

Luego de la suspensión por lluvia de ayer, el sol se asomó y permitió que se disputara el cotejo, que duró una hora y 45 minutos. En ese periodo, el número dos del mundo mostró toda su solidez, apretó desde el fondo de la cancha y complicó muchísimo al marplatense, que luchó e intentó, pero finalmente sucumbió con claridad por 6-2, 6-2 y 6-3.

Este fue el regreso del mallorquín a la cancha principal del certamen francés, tras la prematura eliminación que sufrió el año pasado en octavos de final ante el sueco Robin Soderling. Con esta victoria, Nadal, quien se medirá con el australiano Lleyton Hewitt, consiguió su decimoséptima consecutiva sobre esta superficie.


Celeste y blanca esperanza


La delegación argentina viajó esta tarde a Johannesburgo y arribará mañana a las 3.35, luego de un vuelo de nueve horas. Al llegar, el plantel se trasladará hacia Pretoria, sede de la concentración, y hará un entrenamiento liviano por la tarde. El domingo arrancarán las prácticas formales.


Por Fernando Pecorelle


Tras el primer entrenamiento en el país y el amistoso de despedida ante Canadá, Diego Maradona anunció que la Selección Argentina ya había comenzado a jugar el Mundial. Esta tarde, la delegación completa dio un nuevo paso para incrementar la ansiedad: partió rumbo a Sudáfrica.

El plantel se reunió a las 16 en el predio de la AFA y a las 17.30 se trasladó en micro para acceder directamente a una de las pistas del aeropuerto de Ezeiza. El público, muy numeroso en la puerta del predio de Ezeiza, pudo seguir al equipo en su camino por la autopista, pero no tuvo acceso a la terminal para evitar desmanes.

El vuelo con destino a Johannesburgo se concretó a las 18.30, si bien estaba estipulado para las 18.15, y aterrizará en dicha ciudad a las 3.35 de nuestro país (8.35 hora local). Al llegar, Argentina irá rumbo a Pretoria, donde luego se hospedará en la Universidad de la misma ciudad. Por la tarde está planeado un entrenamiento liviano, mientras que el domingo se haría doble turno. El debut en el Mundial será el sábado 12 de junio frente a Nigeria, en Jonannesburgo, en el arranque del Grupo B que también integran Corea del Sur y Grecia.

Varios integrantes de la delegación, como cocineros, preparadores físicos y encargados de la logística, arribaron a Sudáfrica la semana pasada para poner a punto los últimos detalles. Por otra parte, en suelo africano ya se encuentran las selecciones de Australia y Brasil.